Casi un mes después de la devastadora dana que ha arrasado esta parte del litoral mediterráneo, sus efectos siguen siendo visibles...y duele verlos.
El hombre, desde que lo es, siempre ha peleado contra la naturaleza, y siempre ha perdido. pues cuando ésta reclama lo que es suyo, no hay poder humano que lo evite.
Pero cuando en esa reclamación la intervención humana tiene presencia, el asunto cambia, pues los efectos son susceptibles de ser amortiguados, al menos en cierto modo.
España entera está contemplando a esos valencianos y valencianas que están sufriendo esta catástrofe...y España entera sufre...y España entera se está volcando en ayudar, cada uno como sabe o como puede.
Y voy a decirlo, porque no puedo callarme. Nuestros políticos, de uno y otro bando, compitiendo a ver quién "la tiene más larga". Al amable lector le ruego disculpas por la vulgaridad y ordinariez de la expresión, pero es que no dan margne para opinar de otro modo. A ver quién "la tiene más larga", "quién miente más" y "de quién ha sido la culpa". Lamentable, mientras nuestros vecinos valencianos, con uñas y dientes, intentan levantar cabeza entre la desolación, entre el desastre, entre la catástrofe.
Desgraciadamente, como suele decirse, la vida sigue. Algunos pensarán que en Valencia también seguirá. Claro que sí. Pero lo ocurrido no lo debe olvidar nadie y digo NADIE (con mauyúsculas). Porque Valencia somos todos.
Y si hay que exigir responsabilidades políticas, disponemos del "arma" que más daño hace a un político nacional, autonómico o local: las urnas. Y la podemos utilizar pronto si no olvidamos a Valencia. Porque siguiendo con las vulgaridades, quien "la tiene más larga" en realidad es el pueblo español.
Mientras tanto, gritemos todos muy en alto Vixca Vàlencia...!!!. Estem amb vosaltres...!!!